Pobre hombre,
con angustia te contemplo,
con tu porfía y tu miedo,
desde la cima del tiempo.
Pobre hombre,
sientes hambre, sientes frío,
la mayor parte del día,
pobre hombre.
Pobre hombre,
dominante y dominado,
la caverna y el palacio
te mantienen angustiado.
/Pobre hombre,
que desprecias a tu hermano,
por el color de su piel,
sólo angustia y mala fe/ (bis).