Pobre hombre, con angustia te contemplo, con tu porfía y tu miedo, desde la cima del tiempo. Pobre hombre, sientes hambre, sientes frío, la mayor parte del día, pobre hombre. Pobre hombre, dominante y dominado, la caverna y el palacio te mantienen angustiado. /Pobre hombre, que desprecias a tu hermano, por el color de su piel, sólo angustia y mala fe/ (bis).