Por la sierra de Ronda,
la blanca luna,
señora de mis noches,
y de mis dudas.
Bésame y vete
que me vienen buscando
los migueletes.
Por la sierra morena
repite el eco:
los amores soñados
son los más ciertos.
Ay, yo quisiera
que nunca fuera cierta
ni verdadera.
Luna de los pastores,
campos de nieve
por donde la esperanza
se fue y no viene.
Fuente de los suspiros,
Fuente soñada,
dile que no se quede,
ni que se vaya...
que no se vaya.
Ay, yo quisiera
que nunca fuera cierta
ni verdadera.
Bésame y vete
que me vienen buscando
los migueletes.