Por la sierra de Ronda, la blanca luna, señora de mis noches, y de mis dudas. Bésame y vete que me vienen buscando los migueletes. Por la sierra morena repite el eco: los amores soñados son los más ciertos. Ay, yo quisiera que nunca fuera cierta ni verdadera. Luna de los pastores, campos de nieve por donde la esperanza se fue y no viene. Fuente de los suspiros, Fuente soñada, dile que no se quede, ni que se vaya... que no se vaya. Ay, yo quisiera que nunca fuera cierta ni verdadera. Bésame y vete que me vienen buscando los migueletes.