Rezan las leyes básicas
de una curiosa ética
que el hombre es una máquina,
consumidora intrépida.
Compre electrodomésticos,
dicen los nuevos místicos,
es el gran signo de éxito
del "h*mo sapientísimo".
Producto, consumo,
éste es el triste tema de esta canción,
canción, canción... consumo,
éste es el triste tema de esta canción.
Queda un último término
lo del salario mínimo
con el Madrid-Atlético
y el juego quinielístico.
La corrida benéfica
hoy televisan íntegra,
es la moderna técnica
de crear alienígenas.
Este mensaje estúpido
tan saturado en tópicos,
hay que venderlo al público
como un jabón biológico,
así dispone el código
mafioso-discográfico
y así se explota al prójimo,
prójimo y primo práctico.