Rezan las leyes básicas de una curiosa ética que el hombre es una máquina, consumidora intrépida. Compre electrodomésticos, dicen los nuevos místicos, es el gran signo de éxito del "h*mo sapientísimo". Producto, consumo, éste es el triste tema de esta canción, canción, canción... consumo, éste es el triste tema de esta canción. Queda un último término lo del salario mínimo con el Madrid-Atlético y el juego quinielístico. La corrida benéfica hoy televisan íntegra, es la moderna técnica de crear alienígenas. Este mensaje estúpido tan saturado en tópicos, hay que venderlo al público como un jabón biológico, así dispone el código mafioso-discográfico y así se explota al prójimo, prójimo y primo práctico.