Eric, Peter y Jan son tres cretinos
que juegan sin cesar con mi paciencia.
Adorables los tres, mis tres sobrinos.
Graciosos chantajistas con licencia.
Eric, Peter y Jan son tres sabuesos
que siempre van detrás de algún espía.
Bulliciosos, alegres y traviesos
en su mundo sutil de fantasía.
Eric, Peter y Jan son millonarios
que llevan su tesoro en el bolsillo:
lagartijas de todos los tamaños
y ranas y canicas a porrillo.
Hay que ver cómo escuchan enseguida
un ""tilín"" familiar y callejero,
entonces se produce la estampida,
los tres se van detrás del heladero.
Eric, Peter y Jan, en cuanto llego,
entre los tres desarman mi equipaje,
ellos saben que hay cosas para ellos,
se mueren por saber lo que les traje.
Eric, Peter y Jan son de esos críos
que nadie los retiene en un silla,
que se bañan desnudos en el río,
que siempre se lastiman las rodillas.
Eric, Peter y Jan son tres razones
para recuperar el buen sentido;
no tenemos derecho los mayores
a dejarles un mundo destruido.
Mas si todos los hombres del planeta
cerráramos la puerta al egoísmo,
Eric, Peter y Jan, en bicicleta
jugarían muy lejos del abismo.
Eric, Peter y Jan, mis tres sobrinos,
no importa que me gasten la paciencia,
porque son adorables los cretinos,
graciosos chantajistas con licencia