Eric, Peter y Jan son tres cretinos que juegan sin cesar con mi paciencia. Adorables los tres, mis tres sobrinos. Graciosos chantajistas con licencia. Eric, Peter y Jan son tres sabuesos que siempre van detrás de algún espía. Bulliciosos, alegres y traviesos en su mundo sutil de fantasía. Eric, Peter y Jan son millonarios que llevan su tesoro en el bolsillo: lagartijas de todos los tamaños y ranas y canicas a porrillo. Hay que ver cómo escuchan enseguida un ""tilín"" familiar y callejero, entonces se produce la estampida, los tres se van detrás del heladero. Eric, Peter y Jan, en cuanto llego, entre los tres desarman mi equipaje, ellos saben que hay cosas para ellos, se mueren por saber lo que les traje. Eric, Peter y Jan son de esos críos que nadie los retiene en un silla, que se bañan desnudos en el río, que siempre se lastiman las rodillas. Eric, Peter y Jan son tres razones para recuperar el buen sentido; no tenemos derecho los mayores a dejarles un mundo destruido. Mas si todos los hombres del planeta cerráramos la puerta al egoísmo, Eric, Peter y Jan, en bicicleta jugarían muy lejos del abismo. Eric, Peter y Jan, mis tres sobrinos, no importa que me gasten la paciencia, porque son adorables los cretinos, graciosos chantajistas con licencia