Pasó de moda el Golfo como todo, ¿viste vos? como tanta otra tristeza a la que te acostumbrás. Ahora vas comprando perlas truchas sin chistar, "calles inteligentes" alemanas para armar y muchos marines de los mandarines que cuidan por vos las puertas del nuevo cielo. El bronceador "Charlotte" te cuida de la radiación, rematan el electro de Elvis al morir. Fijate de qué lado de la mecha te encontrás, con tanto humo el bello fiero fuego no se ve y hay algo en vos que está empezando a asustarte... cosas de hechicería desafortunada. Quedate con el vuelto, mula de la enfermedad, pobrete que sos tropa de la guita y chimpancé, quedate esa petaca con saliva y nada más, mordiéndote la lengua por poco me engañás. Sentís la mosca joder detrás de la oreja y chupás la fruta sin poder morderla; y hay muchos marines de los mandarines que cuidan por vos las puertas del nuevo cielo...