No me estás hablando de Él si dices que no te ha escuchado Que te tiene abandonado, sin cuidar de ti No le conoces todavía... Dices que te ignora, que no escucha cuando lloras Y que llegas a dudar si alguna vez estuvo aquí ¿De quién te crees que estás hablando? Ponte a hacer balance y luego... Dime la verdad, ¿Cuánto hace que no le buscas? Dime sin mentir que su compañía lo fue todo para ti Que Él es tu dueño; Déjame saber cuánto hace que no le añoras Dime que fue ayer cuando le citaste a solas por última vez Tu no me estás hablando de Él Te resulta fácil refugiarte en tu amargura Inventarte otros culpables y esperar que acuda el Rey No le conoces todavía... No sabes que Él no responde a gritos ni exigencias Que Él es Dios y tu eres hombre y no te puedes esconder No le impresionan tus historias, ponte a hacer memoria y luego... Dime la verdad, ¿Cuándo le has buscado en serio? Dime sin temor, que tu alma suspira día y noche por su amor Que Él es tu dueño; Deja ya de huir como en una pesadilla Vuelve a la razón, dobla un poco la rodilla y abre el corazón Te queda mucho aún por ver