Hasta atrás llegó el bohemio, Trae el alma malherida, Dicen que fue un gran señor, Pero lo venció el tequila, Las dudas que no se aclaran, Forman mares de rencores, El ambiente ponen tenso, Las mentiras son cortinas Que separan los amores Cuanto halago, cuanta porra, Cuando mi estrella brillaba, Pero bastó un resbalón, Para que me pisotearan, Los que fueron mis amigos, Se olvidaron de mi cara, Pero lo que más me hiere, Que hasta mi propia familia, Al caer me dio la espalda Ven asómate a mi copa, Sepulcro de mi derrota Y el principio de la nada, Haz conciencia y graba el cuadro, Por si acaso tropezaras, Y no olvides ese dicho, Que al borde de el precipicio, La esperanza es buena espada Ven asómate a mi copa, Sepulcro de mi derrota Y el principio de la nada, Haz conciencia y graba el cuadro, Por si acaso tropezaras, Y no olvides ese dicho, Que al borde de el precipicio, La esperanza es buena espada Hasta atrás llegó el bohemio. . .