Maldita sea mi suerte, maldita esta historia sin fin, mezcla de vida y de muerte, que me ha tocado sufrir. Maldita sea para siempre, la estrella bajo la que nací, que al infierno se la lleven, que nunca más salga de allí. No hay pena que no me ronde, me parte hasta un rayo de sol, Hasta mi sombra se esconde, lo que veis, es lo que soy. No hay pena que no me ronde, me parte hasta un rayo de sol, las ilusiones se esconden, lo que veis, es lo que soy. Maldito el año del cerdo, enero desgraciado mes, de aquel perdido invierno, triste día veintitrés. Y que en las listas del tiempo, no se olviden esta vez, de borrar aquel momento, hora: las malditas seis. No hay pena que no me ronde, me parte hasta un rayo de sol, reniego hasta de mi nombre, lo que veis, es lo que soy. Y antes de irme para siempre, te diré que hasta hoy, no fui loco ni fui cuerdo, Lo que ves, es lo que soy.