Esta ciudad se merece un disgusto Un par de verdades a la cara Un escupitajo, una patada Esta ciudad se merece un disgusto Un par de verdades a la cara Un escupitajo, una patada Un animal muerto sobre la almohada Esta ciudad se merece una plaga Que cubra de langosta las fachadas Que no queden en pie ni los cimientos Una obra de arte, un escarmiento Se desata el fuego entre mis dedos todopoderosos No he encontrado a nadie digno de salvarse entre vosotros Me llevo por delante en un instante lo que sale al paso Quedando una columna de humo y cielo sobre mis zapatos El último en caer soy yo