Vuelve a ser real, tu alma está en paz, y a par sola tempestad, y ahora el sol brillará solo para ti, solo para ti. Ven, no tardes en llegar, pues hoy nos vamos a escapar, hay un tren en la estación que no para en ningún lugar, tú solo confía en mí, dame la mano y súbete. Prometo que, jamas bajaré de este tren sin ti. Lo que siento no se puede entender si no subes al tren. Ven, te haré un ataud con el dinero y el poder, porque tú, solamente tú, es todo lo que llevaré, no daremos de solar hasta que tu y yo seamos tres. Prometo que, jamas bajaré de este tren sin ti. Lo que siento no se puede entender si no subes al tren. Sube, sube, sube, sube, sube, sube.