Cada mañana bostezas, amenazas al despertador y te levantas gruñendo, cuando todavía duermeel sol. Mínima tregua en el bar, café con dos de azúcary croissant, el metro huele a podrido, carne de cañón ysoledad. Tirso de Molina, Sol, Gran Vía, Tribunal. ¿Donde queda tu oficina para irte a buscar? Cuando la ciudad pinte sus labios de neón subirás en mi caballo de cartón. Me podrán robar tus días, tus noches no. ¡Que buena están corazón! Cuando pasas grita el albañil el obseso del vagón se toca mientras piensa en ti. La voz de tu jefe brama, ¡estas no son horas de llegar! mientras tus manos archivan tu mente empieza a navegar. Ambiguas horas que mezclan al borracho y al madrugador, danza de traje sin cuerpo al obsceno ritmo del vagón. Hace siglos que pensaron, las cosas mañana iránmejor, es pronto para el deseo y muy tarde en el amor.