Manuel Ascencio Padilla, Padilla Ascencio Manuel no habrá ninguno como él su valor ¡qué maravilla! Empujao' por la guerrilla salió dispuesto a vencer pero le ha de acontecer que en una mala acechanza no perdiendo la esperanza la vida la ha de perder. Juana se hubo de llamar la mujer de aquel valiente caramba, que limpiamente llegó dispuesta a luchar. Una fiera al atacar sin dar ni pedir clemencia' Señor mío, qué conciencia, qué claridad, qué razones conquistando corazones luchó por la independencia. Empujados a luchar se entregan al pensamiento de que al fin un alzamiento habrá de tener lugar. Ya dispuestos a tomar el corbo y la carabina las pampas de la Argentina del godo van a librar. En qué habrá de terminar la muerte ya lo adivina. Uno puede asegurar que no es de hombre el ir llorando ¿a qué seguirse aguantando las ganas de protestar? ahura para rematar, ahura mando, ahura sentencio: no han de quedar en silencio los que han sabido luchar yo prometo continuar por Juana y Manuel Ascencio.