Llega de madrugá y en la nevera no hay ná pa desayunar. Y sus hijos se van al colegio a aguantar las burlas de los demás no los puede cuidar. Quién les podrá decir que no pudo elegir que siempre le ha tocao luchar por sobrevivir. Y la noche caerá como un muro otra vez y a la calle saldrá a buscarse el parné. Diosa de la noche aventurera entre los cuerpos, esos que buscan en ti lo que en su casa no les dan. Diosa de la noche eterna madre, mis respetos, el caballo y esta vida te van dejando en los huesos. Hoy vuelve a acariciar como un frío mortal una aguja tu piel. Y qué triste es morir sola en un callejón tienes que resistir te sobra corazón. Desde los dieciséis aguantando el tirón para ahora abandonar sería darles la razón, a ese que te violó, al que te llama inmoral al juez que te condenó y paga para follar. Diosa de la noche ya estás harta de esta selva, entre monos y camellos han herido a una pantera. Diosa de la noche gran currante, gran obrera pues tu oficio es el más viejo de los que hay sobre la tierra.