Dice que sabe volar con dos alas de papel, que escribe por no llorar las heridas del ayer; que no vuelvan más. Trabaja de estafador. Para Maurice uno y uno no son dos. En la escuela del vivir siempre matricula de honor. Viejo trovador, Siempre de pensión, nunca paga el mes de abril. Si aprieta el corazón: Poema y buen porrón, Y a sonreír. ¿Quién va a pagar? Dice cuando sale del bar y se inventa una canción. Roba un papel y se dibuja como es: mujeriego y soñador, socio del placer. Si saliera de alcalde, todo iría mejor. Rompería las normas, soltaría al ladrón. Estaría obligada la imaginación. Pintaría las calles de color.