Hoy, día de los muertos, desfile de sombras... Hoy, sombra entre sombras, deliro el afán de ser Don Quijote o Don Juan o un bandido o un ácrata obrero o un gran militar. Hoy, quiero ser hombre. Me queman las ansias de ser aguerrido y audaz capitán peleando en la España febril de Valencia, asido a las filas del bando leal. Hoy, quiero ser hombre. Sería un Quijote. Sería el Alonso Quijano verdad, del pueblo que en héroes de vida hoy convierte los héroes en sombras del loco inmortal. Hoy, quiero ser hombre. El más bandolero de los Siete de Ecija. El más montaraz de aquellos que en siete caballos volaban, retándolo todo, a trabuco y puñal. Hoy, quiero ser hombre. Sería un obrero, picando la caña, sudando el jornal; a brazo arriba, los puños en alto, quitándole al mundo mi parte de pan. Hoy, quiero ser hombre. Subir por las tapias, burlar los conventos, ser todo un Don Juan; raptar a Sor Carmen y a Sor Josefina, rendirlas, y a Julia de Burgos violar.