Las cosas sólo son Los rayos, los árboles son Las praderas, los desastres Son las sombras y el calor El mar, la tierra son Las piedras, los pájaros son Sólo son sin albedrío Son los brillos, el color Agradezco su humildad Pues gracias a ella soy Una estrella en el cielo Un camino abierto en flor