Soy del color de tu porvenir me dijo el hombre del traje gris "no eres mi tipo" le conteste y aquella tarde aprendí a correr. Al pisar la estación le abrí la jaula a mi corazón. Tras las montañas estaba el mar la noche, el vértigo, la ciudad, el mundo a cambio de una canción me daba un plato, un beso, un colchón. La única medalla que he ganado en la vida era de hojalata y decepción. No tenía salida el callejón del cuartel para el desertor del batallón de los nacidos para perder. Prima del alma desnúdame del traje gris, de la multitud, devuélveme al camino del Sur al país de la niñez donde uno y uno sumaban tres. La única medalla que me ha dado la vida en el escenario la gané. No tenía salida el callejón del cuartel para el desertor del batallón de los nacidos para perder.