Meloso el tacto del retumbar del pecho Y el notar vida Por cada poro ajeno a la lluvia Arrumacos desnudos, inertes y eternos adornando la ventana donde asoman Las calaveras Las gotas resbalan hacía arriba por el cristal Y retoman su ciclo hacía las nubes Y donde se cimienta el guiñar de los ojos, los deseos terrenales desterrados Desde el ombligo ¡Grita! Grita la red del día, la mañana y su rocío Grita las ramas en que apoyar las garras Gritan las olas del mar El hambre, y la añoranza Grita la madre con desconsuelo Grita con rabia entera la vida Grita con el bozal La lengua suelta Enciscados, alocados, dando buena cuenta de la placenta Deliran las bocas echas Más para besar, que para morder La tristeza como remo acicalan las pieles sin berbe Inadaptadas Insulsas, pero con ganas ¡ehhhh! Atacando la barca en la rivera seca, nadando entre arena Antiguas profecías Del bien y del mal Del bien y del mal que taladran las paredes y embellecen el muro De los fusilaos' De las sin razón Grita la red del día, la mañana y su rocío Grita las ramas en que apoyar las garras Gritan las olas del mar El hambre, y la añoranza Grita la madre con desconsuelo Grita con rabia entera la vida Grita con el bozal La lengua suelta Grita la red del día, la mañana y su rocío Grita las ramas en que apoyar las garras Gritan las olas del mar El hambre, y la añoranza Grita la madre con desconsuelo Grita con rabia entera la vida Grita con el bozal La lengua suelta ¡YEPA! ¡EEEH!