Porque la memoria tiene alas de fuego que encienden la vida con su resplandor, más allá del llanto, el lamento y el ruego, vuela sobre el tiempo su firme clamor. Porque la memoria es un grillo sin pausa que a la fe dormida puede despertar. Porque la memoria es la única causa contra las tinieblas de la impunidad Tengo la memoria... la memoria viva, furiosa y activa, con sed de verdad... fervor en protesta, dolor sin respuesta que entre las cenizas no quiere quedar. Porque la memoria le niega clemencia a la mano oscura que mata y se va, que destroza sueños, amor, inocencia y está tan segura que no pagará. Porque la memoria de bronca y de lucha exige castigo al crimen feroz. Porque a los caídos nuestra sangre escucha, pidiendo justicia con toda su voz. Tengo la memoria... la memoria viva, furiosa y activa, con sed de verdad. Por nuestros ausentes. Con toda la gente que nunca en la vida los podrá olvidar. Tengo la memoria... la memoria viva, furiosa y activa, con sed de verdad... fervor en protesta, dolor sin respuesta que entre las cenizas no quiere quedar... Que entre las cenizas no puede quedar.