Y negamos y renegamos, del sano jardín nos escapamos y te gritamos y te zamarreamos y con nuestras manos disparamos Y no basta disparar tanto es muy fácil ser pulento y violento ese no es el cuento, fíjate bien donde van tus manos, sentimientos, no golpees a tu hermano, si está en la misma dale la mano Así juntos podemos soplar cada vez más fuerte y derribar casas y puentes Con nuestras manos