Su cuerpo desnudo es su lienzo Cosecha de heridas y huesos Antiguos retazos de amarga agonia No logra recordar Ni un solo despertar Sin mordiscos de cuchillas Que han dejado de sangrar La muerte Un arma Saborea sus entrañas Se arranca la vida sin miedo Buscando un perdido consuelo Que calme el dolor Que traiga el sueño a este tormento Un corte mas... La plegaria que nunca olvida... Sumergida en esta oscuridad Destrozada... Consumida... Una costura Por cada nuevo Sol... Sol... La blanca luz del alba Regresa ardiente Y devuelve el aliento Y devuelve las sombras que torturan su alma Su alma... Su alma...