Cómo le pido a la piedra fría Que diga urgentemente la frase conveniente Y le pido a la pupila de mármol Que llore, aun si la lluvia se olvidara del árbol… Pero si le pido al arte que moldea a la roca Con palabras más enormes que las bocas Puede ser que el sol… Puede ser que el sol… Cómo escucharte sin esquizofrenia Que el sucio oportunismo tantas veces premia Cómo te arranco del verso Dicho de memoria Y te tatúo en el alma de todas las novias Pero si mis andares me los alimento Rompiendo monte, sudado y contento Puede ser que el sol… Puede ser que el sol… Cómo te me haces padre, maestro y ácere; Sangre de los pobres, hermano en deberes Cómo fue tu tiempo tan ancho, de arriba abajo Sin ordenador, Internet, ni un carajo Por eso creo en ti Y no en los misereres Que primero te nombran Y al final, te temen Puede ser que el sol Puede ser que el sol El sol Como la estrella que mata e ilumina Que nunca cambia, aunque cambien las heridas Al que encargaste con tu última mirada Que nos dijera, tras cada madrugada: Todo el mundo cuenta Todo el mundo cuenta Todo el mundo cuenta Todo el mundo cuenta La mar en calma, la mar violenta Todo el mundo cuenta La bruja, el enano, el príncipe y la cenicienta Todo el mundo cuenta El gallo bravo y aquel que se ahuyenta Todo el mundo cuenta Quien ve pero se calla y quien ve pero enfrenta Todo el mundo cuenta Quien me da su casa y quien me la renta Todo el mundo cuenta Quien techa ciudades y quien las cimienta Todo el mundo cuenta Quien pichea a la diestra y a la siniestra Todo el mundo cuenta Quien busca y no resuelve, quien sufre y se reinventa Todo el mundo cuenta Verde, amarillo, rojo y magenta Todo el mundo cuenta Quien se regocija y quien se lamenta Todo el mundo cuenta Todo el mundo cuenta Todo el mundo cuenta Todo el mundo cuenta