Recargado en una palma se ve la herradura que marca mi suerte, si he tenido que apostar con gusto doy todo al número siete, la vista fija y muy firme rumbo al horizonte verde al vallesito, el cerro viejo es testigo el tiempo es amigo mi padre te estimo. (ajaaay) Cuatro paredes se encierran larga trayectoria un hombre muy fino, el fuente se queda corto sus vuelos son altos pues sabe de mido, un águila que vigila aunque pasa el tiempo lo miran tranquilo, te espero padre mientras que tu llegas yo cuido y vigilo. Conservo y cuido el tesoro mi bella familia como los adoro, y aunque me pesa su ausencia sigo hacia adelante mi gente ante todo, cuido bien los animales las flores iguales no se han marchitado, la super y el mexicano tu doble rodado tu fino ganado. Si el numero las historias lo que lo conocen saben de quien hablo, es un ejemplo y mi orgullo venir de su sangre eso saben varios, los hechos hablaron solos aqui no hay inventos lo extrañan los ranchos, sin olvidar esa sierra porque ama su tierra su gente y trabajo. El limon se mira verde igual que las palmas ranas de la suerte, aunque se mira muy sola traigo tu pistola permiso y licencia, silla de buena madera y esa linda tierra que tanto te extraña esos frutos de la huerta y esa linda tierra donde has hecho falta.