Nada tienen de especial dos mujeres que se dan la mano el matiz viene después cuando lo hacen por debajo del mantel. Luego a solas sin nada que perder tras las manos va el resto de la piel un amor por ocultar y aunque en cueros no hay donde esconderlo lo disfrazan de amistad cuando sale a pasear por la ciudad. Una opina que aquello no está bien la otra opina que qué se le va a hacer y lo que opinen los demás está demás. Quien detiene palomas al vuelo volando a ras del suelo mujer contra mujer. No estoy yo por la labor de tirarles la primera piedra si equivoco la ocasión y las hallo labio a labio en el salón ni siquiera me atrevería a toser si no gusto ya sé lo que hay que hacer que con mis piedras hacen ellas su pared. Quien detiene palomas al vuelo volando a ras de suelo mujer contra mujer. Una opina que aquello no está bien la otra opina que qué se le va a hacer y lo que opinen los demás está demás. Quien detiene palomas al vuelo volando al ras del suelo mujer contra mujer.