Triste sister, rodando en el amanecer, soltar un mundo paralelo se alínea, sé que toma tiempo ceder, pero me alegro por ti, salvaste la batalla y al fin ya no estás embarrada de mi. Triste sister, regálame tu oración a Dios, préstame la llave maestra, préstame el antiguo radar. Y abraza la lluvia con su sabiduría, y tú no sabes nada. Todas las máquinas se contorsionaban,
y tú tuviste valor. Triste sister, y es que me acuerdo de ti, te estaban esperando y en fin, préstame la llave maestra, préstame el antiguo radar. Todas las máquinas se contorsionaban, y tú tuviste valor. Viste el ombligo del sol, de donde se alimenta el corazón. Todas las máquinas se contorsionaban, y tú tuviste valor.