No... no me de su copa no vale la pena tomar por su amor. No, porque la queria y usted lo sabia que la amaba yo. Si... lo entiendo mi amigo, yo que soy testigo de esta cruel traicion. Usted la adoraba mientras me enredaba, por esa belleza perdi la cabeza y hasta el corazon. Y ahora quiere que brinde por ella la que fue mi estrella y que traicionero usted me robo. No... detenga esa boca y no diga cosas de no estar conciente de que usted la rego, pues me platicaba yo me enamoraba de ese bello angel que usted me describio.
No... no me de su copa acepto las penas que me de el amor. No... quiero consolarlo, quiero aconcejarlo que el amor que es bueno se convierte en celos cuando no es de dos Y ahora quiere que brinde por ella la que fue mi estrella y que traicionero usted me robo. No... detenga esa boca y no diga cosas de no estar conciente de que usted la rego, pues me platicaba yo me enamoraba de ese bello angel que usted me describio. No... No me de su copa.