Te enroscabas en mente y en mi cuerpo
sin saber
te enroscabas en mi alma
sin querer.
Cuando pude reaccionar
con mi espade te corté
para qué
ya era tarde.
Tus heridas te cerraban
para ser
esa esencia que buscaba
aparecer
pero el tiempo me marcó
y aquel instante se cerró
para qué.