Quieto, relájate del todo. Quieto, intenta no pensar. Deja, que yo quiera mi modo. Deja, no trates de mandar. Quieto, refrena tus impulsos. Quieto, mejor con suavidad. Deja, que yo controle todo. Deja, no hay prisas en llegar. Estas horas, entregados, cuerpo a cuerpo, entrelazados, con el ritmo acelerado de nuestra respiración...
Esta noche inolvidable, que aprendimos a ser amantes, nunca debe terminarse mientras vivamos los dos. Quieto, enciéndeme un cigarro. Quieto, charlemos otra vez. Deja, has estado perfecto. Deja, me hiciste más mujer. Quieto, bebamos una copa. Quieto, te necesito más. Deja, que pasen los minutos. deja, ya duerme la ciudad. Quieto.