Ojalá que tu cama estuviera siempre de guardia encaramada en los carteles de neón. Ojalá que volviera a encontrarte fumando en la plaza y dejarte de nuevo sin blanca, sin respiración. Ojalá que tuviera valor, y decirte que no pasa nada son 10 pisos y no hay ascensor hacia el cielo del que tu me hablas. Y no me da la gana marcharme cuando empieza lo peor un nudo en la garganta se intuye por tu voz en el contestador,
tu solo intenta no mentirme hasta mañana. Ojalá que quisieras dormir esta noche conmigo en lugar de violar corazones en salas de estar. Ojalá que ahora mismo me dieras lo que nunca pido y algo de tu paradero porque nunca estás. Ahora sé lo que quieres oír ésta es la última mierda que piso, cinco tipos esperan por ti me parece que yo soy el quinto. No me da la gana… Que empiece lo mejor.