Luis quiso llegar al cielo
De su mundo dibujado
Y la realidad demente
Esta vez lo ha emboscado
Y quién sabe si no es
Su sombra la que hoy
Nos muestra una mueca de risa,
Demacrada su voz
No alcanzo a disipar
Al silencio que se lo tragó.
Luis, gran apuntador de los genios falsos,
Mártir intelectual, te fuiste con tu llanto
A vivir en el cielo para poder entender
Por qué mueren sin ser oídos
Aquellos luises que son como vos..
Humilde ser, tus plantas se aferran hoy
A este infierno
Donde se muerden los hombres
Que alguna vez sonrieron.
Débil está tu herencia
Porque al amor lo persigue la histeria
Del tiempo absurdo que han empleado
Para destruirte.
Luis, ignorando tu esencia,
Porque al fin tan sólo un hombre eras,
Con temor clavándose en tu espalda
Y en las manos toda la impotencia
Esa que también hoy tengo yo.