Ahora ni el cielo te asiste,
y no hay nadie desviviéndose por ti.
Pero el ser humano insiste,
justificas tu existencia con la química,
estoy triste, ¿para qué mentir?.
Haré que el sol salga mañana desde aquí
y por una vez
seré la más bella ciudad
y seré ballena en altamar
y seré la noche al descender.
Por una vez
seré una luz y una canción
y seré la esfera de un reloj que no tiene agujas.
Resuelto ya el misterio,
el futuro aúlla como un animal,
y ahora el único silencio
es aquel que me procuran ciertas drogas.
Tengo miedo, ¿para qué mentir?.
Haré que el sol salga mañana desde aquí
y por una vez
seré la más bella ciudad,
y seré ballena en altamar,
y seré la noche al descender.
Y por una vez
seré una luz y una canción,
y seré la esfera de un reloj que no tiene agujas.