Esas manos que me llevan
Por las calles de la vida
Esa cara que me obliga
A mirarla de rodillas
Sólo hay una, sólo hay una
O tú, o ninguna
Esa voz que me aconseja
No creer en las sonrisas
Ese pelo que me cubre
Como lluvia de caricias
Sólo hay una, sólo hay una
O tú, o ninguna
O tú, o ninguna
No tengo salida
Pues detrás de ti mi amor
Tan sólo hay bruma
Si no existieras
Yo te inventaría
Como el sol al día
O tú, o ninguna
Esa que de puro honesta
En el fondo te molesta
Esa que te admira tanto
Que te obliga a ser un santo
Sólo hay una, sólo hay una
O tú, o ninguna
Confidente de mis sueños
De mis pasos cada día
Su mirada mi camino
Y su vida ya mi vida
O tú, o ninguna
No tengo salida
Pues detrás de ti mi amor
Tan solo hay bruma
Si no existieras
Yo te inventaría
Pues sin duda alguna
O tú
O tú, o ninguna
O tú, o ninguna