Escucho tu voz romperse
Tras un velo de oscuridad
Nuestra adrenalina aumenta
Crece implotándonos
No puedo pensar, no puedo resistir la tentación
Esquizofrenia, demencia extrema bloqueó mi mente
No insistas más, no hay vuelta atrás ni redención
No corras más, la obsesión nos consumió
Punzante ansiedad, libera un orgasmo mental el puñal
Inyecto la ira oprimida en su basta abstinencia
La paz interior resplandece encontrando refugio en la incisión
La calma encerrada en un puño se esfumará
Verás lo efímero de la existencia
El hedor del miedo paralizándote
Sin advertirlo será tu abrigo una mortaja.
No sé del remordimiento
No busco refugio en el culto divino
Borro al instante en mi mente
La acción de mis manos.