Canta bajo la luna,
alguien, alguien sin nadie
te oye llorar de noche
cuando de tu alma sangras.
Ya no me mires así!
Y para qué vivir
si ya no tienes fe
en tu hermano,
al que no amas ya?
¡Ya no me digas que se siente!
Si no se cambia hoy
no se cambia más.
Y tus hijos sabrán
que vendiste tu amor.
Que vendiste tu amor.
Juega, juega que el tiempo huye
y cámbiame por una mosca.
Vierte, vierte tu lágrima
sobre la absurda suerte.
Ya no me mires así!
Si no se cambia hoy,
no se cambia más.
Y tus hijos sabrán
que vendiste tu amor.
¡Ya no me digas que se siente!
Al atravesar
la eternidad
sin una gestión
desde tu corazón.
Tu sombra da contra el muro,
al que quiebras en múltiples ecos.
Y acércate, y ahuyentarás
el desastre de mi alma que sueña.
Bebe, bebe desde el columpio
el agua de la miseria.
Y saca, saca de los que sufren,
y quema la cruz, tan ciego.
Sólo eres esclavo del poder
Y para qué vivir
si ya no tienes fe
en tu hermano,
al que no amas ya?
¡Ya no me digas que se siente!
En la eternidad
sin una gestión
desde tu corazón.
¡Ya no me digas que se siente!
Si no se cambia ya
tus hijos dirán
que vendiste tu amor.
¡Ya no me digas que se siente!
En la eternidad
sin una gestión
desde tu corazón.
¡Ya no me digas que se siente!
Si ya no tienes fe
en tu hermano
al que no amas ya.
¿pero qué es lo que te pasa, nene?