Vuelve a ser real,
tu alma está en paz,
y a par sola tempestad,
y ahora el sol brillará
solo para ti, solo para ti.
Ven, no tardes en llegar,
pues hoy nos vamos a escapar,
hay un tren en la estación
que no para en ningún lugar,
tú solo confía en mí,
dame la mano y súbete.
Prometo que,
jamas bajaré
de este tren sin ti.
Lo que siento no se puede entender
si no subes al tren.
Ven, te haré un ataud
con el dinero y el poder,
porque tú, solamente tú,
es todo lo que llevaré,
no daremos de solar
hasta que tu y yo seamos tres.
Prometo que,
jamas bajaré
de este tren sin ti.
Lo que siento no se puede entender
si no subes al tren.
Sube, sube, sube,
sube, sube, sube.