Por el puente Cantalojas
a las doce menos diez
se ha asomado un borracho
para ver salir un tren;
su mirada estaba triste
pues mi amor se ha ido en él.
Una chica de las Cortes
ya cansada de vivir
aguantando a este borracho
se ha pirado "pa" Madrid;
ya no quiere dar más besos
disfrazados de carmín.
Por el puente Cantalojas
a las doce menos diez
se ha asomado un borracho
para ver salir un tren;
su mirada estaba triste
pues su amor se ha ido en él.
En el puente el silencio se puede cortar,
ha roto una botella y se ha puesto a llorar,
y se va caminando buscando un hogar;
ni la luna le guía lo podrá encontrar.