Por el puente Cantalojas a las doce menos diez se ha asomado un borracho para ver salir un tren; su mirada estaba triste pues mi amor se ha ido en él. Una chica de las Cortes ya cansada de vivir aguantando a este borracho se ha pirado "pa" Madrid; ya no quiere dar más besos disfrazados de carmín. Por el puente Cantalojas
a las doce menos diez se ha asomado un borracho para ver salir un tren; su mirada estaba triste pues su amor se ha ido en él. En el puente el silencio se puede cortar, ha roto una botella y se ha puesto a llorar, y se va caminando buscando un hogar; ni la luna le guía lo podrá encontrar.