oh! Que gran decepción hoy al abrir los tarros que habíamos guardado y cuidado con tanto amor
descubrimos que el almíbar sabía muy mal el cristianismo de estas guindas no se pudo conservar.
Y devolvimos todo
y nos sentimos mal
nos aburrimos tanto
es que está todo mal
Sirvamos bien la mesa dispuestos a tragar
probemos estos manjares que nos saben a maldad
una pizca de hierba, para poder olvidar
para poder aguantar las ganas de asesinar.
Madre escuchaste a los niños cantar
y recordaste lo que no querías recordar
estas legumbres que vamos a comer
saben igual que las balas que tuviste que tragar sin querer.
Eugenia, hay porotos con longaniza en el refrigerador
sirvamos bien la mesa y sentémonos a cenar
probemos estas frutas que nos saben a maldad, tanta maldad
dejemos que nuestras tripas se contaminen con el sabor real