Sólo tengo 16 y una vida para quemar.
Soy la punta de un misil que rebota por la ciudad.
Ocupando cada rincón, encontrando mi dirección.
Es así como voy a estar, es mi tiempo para probar.
Ya verás (ya verás) tu corona de espinas.
Cuándo? Cuándo? No se muy bien cómo es que llegue acá?
Manejando un ascensor, mi deber ahora es trabajar.
Pierdo pelo y pierdo humor, pierdo fuerzas para arrancar.
Tanto tiempo me hizo ver, que no soy nadie en especial.
Ya verás (ya verás) tu corona de espinas.
Ni toque los 83, y el asilo ya es mi lugar.
Mi familia me abandonó, me visitan en Navidad.
Enfermeras drogándome, sobre ruedas mi cuerpo va.
Cuánto tiempo voy a estar, soportando esta soledad.
Ya verás (ya verás) tu corona de espinas.