Dr. Luis: Adelante.
Paciente: Hola buenas
Dr. Luis: Hola, usted dirá
Paciente: Pues mire doctor, vengo notando últimamente como un dolor aquí en la entrada del estómago y tengo bastantes flatulencias.
Dr. Luis: ¿Y las heces son normales?
Paciente: Pues la verdad es que no, lo mismo estoy estreñido que tengo cagalera o cago maíz sin digerir ¡y ni siquiera haberlo comido!
Dr. Luis: Pues puede ser que haya comido algo en mal estado, o en algún buffet chino o en un wok?
Paciente: Pues recientemente no.
Dr. Luis: ¿Y ha viajado usted a algún país exótico?
Paciente: Hombre, he estado en una misión en el espacio sideral... no sé si puede ser eso.
Dr. Luis: Mmmh...cuente, cuente
Paciente: Un dia recibimos una señal de socorro de una nave misteriosa en un planeta desconocido. Acudimos al rescate, yo iba con toda la escafandra y toda la hostia. Al entrar había un montón de huevos enormes allí plantados.
Dr. Luis: ¿Cuantos más o menos?
Paciente: Bufff, un huevo
Dr. Luis: ¿Uno solo?
Paciente: No, un huevo me refiero a muchos.
Dr. Luis: Ah
Paciente: Me quité el casco porque me estaba sudando hasta la comisura del ojete y me acerqué a uno de los huevos; me pareció que se movía y me dije “coño, va a ser un Kinder gigante, a ver qué regalo tiene dentro.” Entonces se abrió y salió un bicho asqueroso que se me pegó en la cara, y hasta hoy. Mire ya da pataditas.
Dr. Luis: Señor Pedralves usted lo que tiene es un alien.