Capricornio la llamé
es mi isla interior.
No me iría allí sin ti
ni jamás lo pensé.
En tu risa se oye el mar
no parece un mal lugar.
No tiene dirección
ni hay forma de llegar
sin una invitación
a no salir ya más.
El diario y un café
y tus besos después.
Una pieza lenta que
algún día bailé.
Todo esto y mucho más
en mi feudo personal
No habrá lugar mejor
no busques mucho más
elige un buen rincón
y olvida lo demás.
No mires más allá
no está en mitad del mar.
Corónate y serás
tu rey particular.