Salió la gallina, salió a pasear
con sus diez pollitos por el corral.
Doña Cocorica les hace ver
lo que todo pollo debe saber:
Aprendan primero que aquí en el corral
su padre el Gallo es la autoridad;
a diario, temprano, se oye su voz,
y es porque ordena que salga el Sol.
Doña Cocorica se encariñó
con los diez pollitos que Dios le dió,
apenas salieron del cascarón
y ya todos saben bien la lección
Ahora pollitos tendrán que buscar
algún gusanito para merendar.
Y al verlos rascando tras una lombriz,
la dulce Gallina es muy feliz.
Doña Cocorica con sencillez
se siente orgullosa de ser quien es.
Mirando a los rubios bajo sus pies
son bolas de estambre de tipo inglés.
Escuchen pollitos, no deben correr
pues son pequeñitos, se pueden caer.
A los pollos tontos se los comerán
los pícaros gatos o el gavilán.
Los pícaros gatos
o el gavilán...