Guillermo Tell no comprendió a su hijo que un día se aburrió de la manzana en la cabeza. Echó a correr y el padre lo maldijo pues cómo entonces iba a probar su destreza. Guillermo Tell, tu hijo creció, quiere tirar la flecha le toca a él probar su valor usando tu ballesta. Guillermo Tell no comprendió el empeño pues quién se iba a arriesgar al tiro de esa flecha. Y se asustó cuando dijo el pequeño, ahora le toca al padre la manzana en la cabeza. Guillermo Tell, tu hijo creció
quiere tirar la flecha. Le toca a él probar su valor usando tu ballesta. A Guillermo Tell no le gustó la idea y se negó a ponerse la manzana en la cabeza. Diciendo que no era que no creyera pero qué iba a pasar si sale mal la flecha. Guillermo Tell, tu hijo creció quiere tirar la flecha. Le toca a él probar su valor usando tu ballesta. Guillermo Tell no comprendió a su hijo que un día se aburrió de la manzana en la cabeza.