Arrullo que dura la vida...
Tu sino me persigna.
Entre el amor y el dolor,
llego la hora de la despedida.
Arrullo que enjunja (¿?) con brisa...
La música es tu sonrisa.
Mi alimento, tu pecho, tu vida, un instante una luz, la partida.
Te veo y espero,
que cruces sin dolor,
y en paz nos dejes atrás...
Te quiero y deseo
que tu alma vuelva ya
a ser una estrella...
Ya llegó la nave que te llevará.
Cruzaste ya el valle,
de lágrimas, el mar.
¿Cuántas veces tú me cruzaste?
Y el sueño me arropó.
Hoy quiero acompañarte,
Hoy te arrullaré yo.