Esto acaba como empezó:
tú te vas a quedar hasta que acabe de hablar
y luego no sabrás qué hacer ni yo a dónde mirar
y empezaré a divagar.
Y cuando por fin me haya callado nos iremos a pasear
y no sabré qué estás pensando ni lo podré adivinar.
Y te llevaré a algún sitio y estará cerrado
y esto debería acabarse aquí y así.
Pero me conozco y sé que intentaré arreglarlo
y por probar te contaré uno de esos chistes malos
que vacían las habitaciones y acaban con las conversaciones
y nos reiremos los dos
y lo arreglaremos porque tú y yo somos lo peor.
Y cuando por fin me haya callado nos iremos a pasear
y no sabré qué estás pensando ni lo podré adivinar.
Y te llevaré a algún sitio y estará cerrado y bla bla bla bla.