Mis sueños eran sólo
Amargas esperanzas
Jamás cruzó tu sombra
Las puertas de mi alma
En el jardín secreto
Se oculta tu mirada
Entre las flores muertas
Mi sangre se derrama
Tan fría noche que se oculta
Entre mis venas, en mi alma...
Tu espíritu logró saciarme
De esta agonía que me invade
Me posesionas de lujuria
Y me transformas en el fuego
Entre tus brazos arderé
Dame tu sangre eternamente
Eternas son las noches
Eternos los lamentos
Conjuros en mis labios
Solían ser antes rezos
Mi sangre un juramento
Mi llanto el silencio
Tu alma el sendero
Camino al infierno
Mi espíritu se ha roto otra vez
Mi cuerpo no es el mismo de ayer
Tu aliento fétido me invade...
Mis sueños eran sólo
Amargas esperanzas
Jamás cruzó tu sombra
Las puertas de mi alma
Serás solo recuerdo
De quien robó mis miedos
Ahogados en tus ojos
Para volverse eternos
Para volverse eternos...