Cuando miro tus ojos veo en ellos la Patria no puedo separarlos de esa imagen tan clara. Ellos son como el viento que hace temblar las ramas tú me miras y entonces amanece en las Guásimas. Quédate para siempre en mi noche, mi lámpara mi amor tiene en tus ojos su alimento, su llama
tú duermes y yo escribo y todo es bello amada el mundo, las estrellas los campos y las fábricas. Quédate para siempre en mi noche, mi lámpara que no se apague nunca ni un día tu mirada, que no se apague en mí el azul de esta llama clara como los días que crecen en la Patria.